Miradas cruzadas hacia territorios en transición

Turin, del 19 al 21 de septiembre de 2018

La agricultura y la comercialización de productos agroalimentarios se sitúan al centro de las problemáticas en torno a la sostenibilidad de las áreas rurales. Los territorios rurales a menudo sufren por su aislamiento, carencia de servicios públicos de calidad y se ven afectados por una serie de transformaciones asociadas a cambios económicos, sociales y climáticos. Estas transformaciones, están llevando a un declino de la agricultura familiar, un aumento de las brechas sociales entre zonas urbanas y rurales y a un conjunto de problemas asociadas por el envejecimiento de la población y la falta de relevo generacional en zonas rurales. Sin embargo, de forma paralela a esas tendencias que golpean el mundo rural, se está produciendo a nivel internacional un nuevo impulso en la generación y adopción de soluciones innovadoras que apuntan hacia transiciones económicas, ecológicas y sociales que abren la puerta a un futuro prometedor para productores y habitantes de territorios rurales. Estas soluciones se experimentan a pequeña u gran escala en territorios muy diversos del planeta.

De hecho, la toma de conciencia del estancamiento ecológico actual desencadena un movimiento activo de participación ciudadana para el impulso a modalidades de producción y consumo sostenibles, que no solo se preocupan por su impacto en el medio ambiente (producción orgánica, consumo local, etc.) pero que también apuestan a la valorización de las diversidades culturales de los territorios (productos con identidad territorial, sellos y signos distintivos de calidad). Cada vez más productores y consumidores ven la necesidad de reconciliar los aspectos ecológicos y culturales en sus modos de producción y de consumo.

La promoción de productos alimentarios locales, a través de mecanismos diferenciadores como los sellos de calidad y origen se convierte en una estrategia relevante para acompañar las transiciones que viven los territorios hacia un mejor reconocimiento de sus particularidades. Por su carácter emblemático, estos productos y las dinámicas sociales asociadas a su valorización contribuyen efectivamente a la preservación y la vitalidad de las diversidades naturales y culturales.

Esta promoción productos y servicios de calidad de un territorio puede también convertirse, en algunos casos, en una fuerza motriz del desarrollo sostenible, por ejemplo, a través de la articulación con nuevas formas de pensar y hacer turismo. Esas dinámicas se ven reflejadas en tendencias como el « turismo slow« , un concepto fiel a los principios del movimiento Slow Food que surge como contrapropuesta a la industrialización del sector y a sus múltiples impactos (artificialización de espacios naturales y folklorizacion de la cultura, presión excesiva sobre recursos naturales, homogenización de los servicios prestados),

En ese sentido, los productos y servicios con identidad territorial son cada vez más demandados porque benefician de una imagen y una reputación sólidas. Sin embargo, el valor agregado generado por la comercialización de estos productos y servicios no siempre se queda en las manos de los actores locales y de sus territorios. Si bien en algunos casos, especialmente en Europa Occidental, las formas de gobernanza y gestión territorial permiten que el valor se distribuya de forma cada vez más equitativa y positiva, en muchos territorios de países en desarrollo estos procesos aún son llamados a consolidarse.

En ese sentido, la introducción de innovaciones es necesaria para que los emprendedores rurales valoricen sus productos y servicios con identidad territorial, respetando las diversidades y los recursos naturales, para generar ingresos económicos en beneficio de sus territorios. 

El Foro Origen, Diversidad y Territorios – ODT 2018, en su sexta edición propone explorar y poner en perspectiva el tema de las TRANSICIONES ecológicas y sociales en los territorios, organizando un espacio único de aprendizaje entre el 17 y el 21 de Septiembre combinando una « formación itinerante » en la región del Piemonte italiano seguida de dos días de debates e intercambios pensados de forma articulada con el encuentro internacional “Terra Madre-Salone del Gusto”, organizados por Slow Food en Turín, Italia.

A través de un riguroso proceso de selección, proponemos reunir a actores territoriales de países de África, Europa del Este, América Latina y Asia, portadores de innovaciones y comprometidos con la valorización de recursos locales en territorios en transición ecológica y social.

Estos líderes territoriales participarán en el Foro ODT 2018, presentando su territorio, sus productos y servicios y participando en sesiones de intercambio y debate con expertos internacionales.

Los principales temas de los talleres y espacios de intercambio de experiencias serán los siguientes: